Decálogo "La aportación de la Tecnología Sanitaria en el cuidado del paciente oncológico"

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El cáncer es una de las enfermedades de mayor relevancia en el mundo por su incidencia, prevalencia y mortalidad.

En el ámbito de la Oncología, el desarrollo de nuevas tecnologías sanitarias ha contribuido a mejorar notablement el nivel de salud de la población, aumentando las posibilidades de curación y los tiempos de supervivencia de muchos pacientes. Actualmente el índice de supervivencia en los distintos tipos de cáncer es un 20 % mayor que en los años 80.

El incremento histórico se debe también al aumento efectivo del número de casos (asociado al aumento de la esperanza media de vida, además de otros factores) y a registros mejores y más completos. Los avances han sido importantes pero aún queda un largo camino por recorrer.

El gran reto de todos los agentes que intervienen en el sector oncológico es el de reconciliar una creciente demanda de servicios sanitarios con una cantidad de recursos que son limitados. Para poder establecer prioridades que marquen nuevas áreas de actuación, todos los agentes implicados abogan por sentar las bases para mejorar la asistencia sanitaria del paciente oncológico, ya que este conjunto de enfermedades requiere un diagnóstico correcto de la enfermedad, información precisa de la terapia y apoyo psicológico que favorezca su calidad de vida y la de sus familiares.

La seguridad del paciente y del profesional sanitario puede verse comprometida cuando están recibiendo tratamiento, por lo que debería generarse una normativa orientada a mejorar la calidad y seguridad para evitar posibles errores y otros efectos adversos.

La Fundación Tecnología y Salud está comprometida con el desarrollo de las nuevas tecnologías para mejorar el control y seguimiento de la enfermedad y defiende su uso eficiente para mejorar la calidad de vida del paciente oncológico. Esto supone poner el foco en distintas áreas y actuar desde distintos puntos de vista.

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